HOY FUI A EL CHOYO
Desde tiempos remotos registrados por historiadores como don Jorge Lardé Larín, se dice que el antiguo asentamiento colonial de San Juan Chinameca, tubo su origen en lo que actualmente es el lavadero público conocido como El Choyo y sus alrededores en el cantón Copinol Segundo, al sureste de la actual ciudad.
Lavaderos públicos El Choyo Chinameca
Lavanderas regresando a casa
La huella del tiempo y el descuido
Los niños colaboran con el acarreo de agua en cántaro hasta su casa.
Al hacer la visita a este sitio rodeado de grandes árboles de especies como el ojuste, amate de agua, mamey, Chaquiro, pepetos y otras más, se disfruta un ambiente tranquilo y fresco en medio de una agradable sombra. Esta arboleda es la que propicia que los nacederos o fuentes superficiales, provean del valioso líquido a los vecinos de la zona donde se abastecen para el uso doméstico y abrevar sus animales. Los antiguos lavaderos aún conservan el diseño original con el que fueron construidos por gobiernos municipales de los años iníciales de 1900, se puede ver que se utilizó una mezcla llamada calicanto, aglomerado de cal más arena; pues en esa época el cemento no era producido en el país.
Algunas mujeres acomodaban su ropa lavada y húmeda en huacales plásticos y los ponían sobre su cabeza, listas al regreso a casa. Viven en humildes viviendas construidas de bahareque, o bien, de láminas y plásticos u otros materiales que dejan ver su precaria situación económica. Aunque esta zona de El Choyo está muy próxima a la ciudad, pareciera que la distancia en el tiempo fuera al extremo opuesto del planeta.